La comarca de las Loras es rica en manantiales y surgencias de gran belleza; ya hemos mostrado aquí unas cuantas. Hoy nos trasladamos a la cada sur de la extensa peña Ulaña, para mostrar un enclave sorprendentemente poco conocido: el nacimiento del río de los Ordejones.
Cerca de la carretera que bordea la altiplanicie, a la sombra del cerro de peña Castillo, se encuentra el semiarruinado pero aún bello Molino de Bernabé.
A corta distancia del molino, en dirección al monte, se encuentra una surgencia permanente que en su momento era la que alimentaba los rodetes de la instalación. Es la fuente principal del río de los Ordejones y su vallado denota que es usada para suministro del cercano pueblo homónimo.
Pero, como vemos, en épocas de lluvias y deshielos existe un abundante suministro aguas arriba, desde el mismo corazón de Peña Ulaña, formando un vallejo que nos permite ascender hacia el monte.
El agua cae con rapidez mediante múltiples y sonoros saltos. Una antigua calzada muy maltratada va paralela al torrente.
Aquí observamos incluso un rústico puente sobre el arroyo
Pasadas unas decenas de metros accedemos a la parte intermedia de Peña Ulaña, zona conocida como "cinto" o "cincho", ocupada en buena medida por pinares. El sendero se separa del torrente que continúa ladera arriba.
Con un poco de esfuerzo podemos ir remontando el mismo.
Llegado al pinar el torrente se calma. Decidimos en todo caso continuar subiendo hasta su fuente; un manantial conocido como Cueva del Gato, y que como apuntamos sólo está operativo en épocas lluviosas.
Cueva del Gato se encuentra justo debajo de las imponentes moles calizas de la parte alta de Peña Ulaña.
El vallejo formado por el torrente del río de los Ordejones es uno de los posibles accesos a Peña Ulaña. Lo aprovecharemos para una ruta de senderismo que describiré en el próximo artículo.
Cerramos este de hoy con un vídeo de la parte más baja y grabado en un momento en el que había menos agua. Aún así sirve para hacerse a una idea de la belleza del lugar.