Poco necesita Orbaneja del Castillo de promoción: su bien conservado caserío, su ubicación en plena ladera del cañón del Ebro, su cascada y su difusión continua en todo tipo de medios de comunicación hacen de este uno de los lugares más visitados de nuestra provincia.
Lo que es difícil de asumir, aunque en nuestra provincia estamos acostumbrados a todo, es que las administraciones no hayan apostado lo suficiente por el lugar como para proveerlo de unas instalaciones mínimamente adecuadas al volumen de transeúntes y para que la oferta turística y cultural pueda ser un poco más consistente y vaya más allá del "aparco - tiro fotos - tomo una cerveza (si acaso) y me marcho". Esperemos que nunca deje de ser un pueblo de cuento.
Poco más que decir, las imágenes se venden solas. Al final un pequeño vídeo.