Riocavado de la Sierra es una localidad serrana como pocas en la provincia. Dispone de un amplio territorio que desciende desde las cimas de la Demanda, cubierto de extensos bosques otrora ocupados por los pastizales de una amplia cabaña ganadera. Uno de nuestros ríos más emblemáticos, el Arlanzón, nace en sus dominios, pese a discurrir en la vertiente contraria de la sierra. Tan abundantes debían ser desde antiguo las hayas que, en la tradicional fiesta del pingado de mayo, era un ejemplar de este árbol, y no un pino como suele ser habitual, el que se colocaba enhiesto en el pueblo.
El núcleo urbano como tal muestra un estructura de casas serranas con algunos ejemplos como los que podemos ver en las siguientes imágenes.
Pero sin duda el elemento patrimonial más interesante de la localidad es su iglesia parroquial de Santa Coloma o Columba. Conserva del periodo románico la cabecera y la torre, mientras que el grueso de la nave sufrió una transformación en el siglo XVIII. Mientras que la primera sigue el estilo de otras localidades de la zona, más original es el ábside.
Al exterior del ábside nos encontramos con una construcción sencilla en lo decorativo, pero robusta y elegante en lo arquitectónico. Llama la atención la existencia de amplios arcos ciegos en cada uno de los muros de los paños, solución que se asemeja a construcciones algo distantes, como las de La Piedra o San Juan de Ortega.
Más interesante es el interior, al cual no tuve acceso en esta ocasión. En el mismo también vemos patrones alejados de los de otros templos serranos. En especial la arquería ciega que recorre el ábside nos recuerda a algunos de los templos norteños de la provincia. También se pueden encontrar algunos capiteles historiados, bastante simplistas, así como una inscripción que data la construcción en el año 1114.
Elemento consustancial a la imagen de la iglesia fue durante varios siglos la olma centenaria, ya desaparecida. En esta imagen de época podemos verla en todo su esplendor, calculándose 30 metros de altura y casi siete metros de perímetro de tronco.
foto tomada de la página de panoramio http://www.panoramio.com/photo/12033319 |
Murió por la terrible grafiosis a mediados de los años ochenta. Algunos suponen que fue plantada tras la construcción del templo, aproximándose con ello su edad a los nueve siglos. Tanta era su presencia que, durante varias décadas más, su cadáver aguantó hasta que finalmente no quedó rastro.
Imagen de la olma que muchos tenemos en la retina. Tomada de uno de los carteles explicativos. |
Aspecto actual del entorno de la iglesia |