Las fuentes del río Nela, el principal rio de las Merindades, se ubican en un singular paraje conocido como "la Matanela", una suave hondonada prácticamente en la divisoria entre Cantabria y Burgos. El nacimiento exacto es difícil de ubicar, en parte por la dificultad del acceso por los vallados ganaderos y en parte porque se trata más bien de una turbera de la que van manando las aguas.
El lugar, hoy ocupado por prados, debía poseer una belleza diferente en el pasado. Se cuenta que un hidalgo cabalgó por estas tierras en el siglo XVII recogiendo sus experiencias en un manuscrito. En el mismo recogió la idea de que este rio Nela emergía de una piedra que Dios exprimió después de crear el mundo, para lavarse las manos, antes de descansar el último día.
Varios parques eólicos se encuentran en las inmediaciones. Uno de ellos se encuentra en el paraje de "La Peñuca", el cordal mediante el cual la divisoria empieza a recuperar fuerza buscando las cumbres de los Montes de Valnera y Somo. Camino de este parque encontramos una singularidad: un enorme reloj de sol construido con una gran piedra y un arco metálico.
Varios parques eólicos se encuentran en las inmediaciones. Uno de ellos se encuentra en el paraje de "La Peñuca", el cordal mediante el cual la divisoria empieza a recuperar fuerza buscando las cumbres de los Montes de Valnera y Somo. Camino de este parque encontramos una singularidad: un enorme reloj de sol construido con una gran piedra y un arco metálico.
Fue construido en 2006 por un grupo de ex-mineros del Bierzo aficionados a los relojes de Sol; aprovechando la maquinaria que se había usado en la construcción del parque. La roca sobre la que se proyectan las horas tiene un peso de 45 toneladas.
El emplazamiento es ciertamente interesante. Aquí vemos el reloj con el fondo de "La Matanela" y los montes del puerto de El Escudo.
Aquí la vista de los valles pasiegos hacia la zona de San Pedro del Romeral. Al fondo las cumbres de Castro Valnera.
Las mismas cumbres con el Reloj en primer plano.
Pero este enclave aún tiene otro elemento de interés: Un singular hayedo un poco más abajo del cauce, y que mostraremos en nuestro próximo artículo.